sábado

Sentirse in-comprendido



Hay dolores que nunca hemos vivido: se corresponden con historias muy ajenas a la nuestra, y sólo podemos imaginar lo que se sentirá en determinada situación... pero sólo eso: imaginarlo. Pero hay un dolor, en cambio, que toda persona que busque comprenderse a sí misma y a su entorno ha de vivir, inevitablemente: el dolor de no sentirse comprendido. Expresarnos, y ver que no somos captados. Decir una cosa, y que se entienda otra. Si "comprender" significa "abarcar" (como cuando decimos que tal predio "está comprendido entre tales y cuales calles"), el hecho de que no nos comprendan significa que no nos abarcan: somos in-comprendidos. Pero hay que saber cuatro cosas: 1) Toda persona compleja no es fácil de ser abarcada por un otro. 2) Es muy posible que el otro sienta lo mismo respecto de que no le comprendamos (y tenga razón!). 3) En ese caso, si estamos desprevenidos, querremos convencerlo de que SÍ lo comprendemos (porque no advertiremos nuestra propia limitación al respecto: la vemos sólo cuando es EL OTRO el que CREE comprendernos!). 4) Que no nos comprendan no es sinónimo de que no nos amen: uno puede amar sabiendo que una parte del otro... nos es un misterio!
LAS PALABRAS SON VENTANAS (O SON PAREDES)

“Siento que tus palabras me sentencian,que me juzgan y que me apartan de ti,pero antes de irme, tengo que saber si eso es lo que quieres decirme.
Antes de erigirme en mi defensa,antes de hablar herida o asustada,antes de levantar esa pared de palabras,quiero saber si verdaderamente he oído.
Las palabras son ventanas o paredes;nos condenan o nos liberan.
Ojalá que al hablar o al escuchar resplandezca la luz del amor a través mío.
Hay cosas que necesito decir,cosas muy significativas para mí.
Si no me expreso claramente con mis palabras,¿me ayudarás a ser libre?
Si te pareció que quise rebajarte,si creíste que no me importabas,trata de escuchar a través de mis palabraslos sentimientos que compartimos.”
Ruth Bebermeyer
Pensamiento sensible